La barbacoa, un domingo regio por excelencia
En Monterrey, los domingos son sinónimo de muchas cosas: familia, descanso y, por supuesto, barbacoa. Esta tradición arraigada en la cultura regiomontana ha convertido a este platillo en un elemento esencial de los desayunos dominicales.
La barbacoa, una preparación culinaria que consiste en cocinar carne, principalmente de la cabeza de res, en un horno de barro durante varias horas, es un manjar que ha sido transmitido de generación en generación. La carne, cocida lentamente a baja temperatura, adquiere una textura suave y un sabor inigualable gracias a la combinación de especias como cebolla, laurel, orégano, ajo, pimienta y, en algunos casos, salsa de soya.
Un ritual dominical
Para los negocios, pPreparar barbacoa es todo un ritual. Desde la noche anterior, se comienza a marinar la carne y a encender el horno de barro. Al amanecer, el aroma de la carne cocinándose invade las calles, anunciando que el día ha comenzado de la mejor manera.
Los regiomontanos suelen disfrutar de la barbacoa acompañada de tortillas de harina, conocidas como "güeras", y una variedad de salsas, destacando la salsa de chiltepín, que le da un toque picante al platillo. El limón, la cebolla y el cilantro son otros ingredientes indispensables para realzar el sabor de la carne.
Más que un alimento, una tradición
La barbacoa no es solo un platillo, es una tradición que representa la identidad regiomontana. Los domingos, las familias se reúnen alrededor de la mesa para disfrutar de este manjar y compartir momentos especiales.
Además de su sabor delicioso, la barbacoa tiene un valor cultural muy importante. Es un símbolo de unión familiar y de las raíces de la región.
Un legado culinario
La tradición de la barbacoa en Monterrey se ha mantenido viva a lo largo de los años gracias a la pasión de los regiomontanos por su gastronomía. Cada fin de semana, decenas de familias se dedican a preparar este platillo en sus hogares, mientras que numerosos restaurantes ofrecen barbacoa para aquellos que prefieren disfrutarla fuera de casa.
En definitiva, la barbacoa es mucho más que un simple alimento. Es una experiencia culinaria que evoca emociones y recuerdos, y que ha logrado trascender generaciones.