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24 por ciento de los proyectos se paran por miedo al fracaso

 

En un entorno  empresarial donde el éxito es ampliamente reconocido y celebrado como la meta de toda organización, la percepción del fracaso frecuentemente se ve ensombrecida por un estigma de vergüenza y rechazo. Esta visión, predominante en muchas culturas corporativas, plantea una pregunta fundamental: ¿Quién aspira conscientemente al fracaso? Aparentemente nadie; sin embargo, el fracaso ofrece oportunidades valiosas para el aprendizaje, el crecimiento y la innovación.
“Cometer errores es algo inevitable, el verdadero problema es que se atribuye a rasgos negativos de las empresas y colaboradores, cuando en realidad es un elemento clave del proceso de aprendizaje, que si se esconde abajo de la alfombra por miedo o pena, se están perdiendo importantes oportunidades para alcanzar metas ambiciosas”, explica  Eric Jiménez, Gerente General Global de Fuckup Nights, movimiento global enfocado en crear experiencias que deconstruyan la percepción de fracaso.
Añade que aunque el fracaso forma parte de la naturaleza del ser humano y del día a día de las empresas, rara vez se estudian sus impactos o se indaga para aprender de esos errores, esto ha llevado a que el miedo al fracaso se generalice y como consecuencia, el 24% de los proyectos impulsados por los colaboradores de una organización se detienen por miedo a fracasar.
En el Reporte Failure At Work 2023: Tendencias, Datos e Insights sobre el Fracaso en el Lugar de Trabajo (2022-2023), Fuckup Nights hace un diagnóstico para evaluar la relación e impacto del fracaso en las empresas con el objetivo de identificar áreas de mejora y oportunidades de crecimiento en su cultura de trabajo.
El estudio revela que aunque en 2023, el porcentaje de proyectos parados por miedo al fracaso disminuyó (en 2022, fue de 32%), se trata de un tema recurrente en las organizaciones, lo que demuestra que aún hay mucho trabajo por hacer hacia la transformación en la narrativa del fracaso. 
“Sí, el miedo al fracaso está disminuyendo. No obstante, persisten el estigma que lo rodea y la falta de estrategias para gestionarlo. Las empresas no enfrentan el fracaso, lo postergan, lo aplazan, independientemente del alivio a corto plazo que esto les provoca, la razón sigue”, afirma Jiménez. 
La confianza es otro tema pendiente. Datos de Fuckup Nights arrojan que el 36.3% de las personas prefiere postergar los resultados de su proyecto por miedo a que necesiten mejoras, se trata de un indicador que en 2023 creció en comparación con 2022 cuando se registró un 33.5%. 
El mismo estudio señala que el 11.7% de los colaboradores normalmente implican a alguien en los proyectos porque si algo sale mal, no son los únicos responsables. Además, el 21.3% prefieren  dejar de proponer ideas por miedo a que sean rechazadas.
¿Qué deben hacer las empresas ante el fracaso? 
De acuerdo con Fuckup Nights, las organizaciones pueden transformar su forma de afrontar el fracaso si llevan a cabo los siguientes acciones:
1. Fomentar una cultura laboral abierta al fracaso
“Se necesitan empresas que acepten y aprendan del fracaso en lugar de castigarlo. La innovación y el progreso están vinculados con la audacia, la valentía y el valor de intentarlo”, comenta Jiménez. 
2. Entender el fracaso como una experiencia humana
Todas las personas se equivocan, las empresas que logren entender el fracaso como parte de la experiencia humana y no como un rasgo negativo de sus equipo, están un paso adelante.
3. Compartir historias de fracaso 
Si las empresas crean espacios seguros para hablar del fracaso, el equipo se sentirá menos vulnerable y tomará de manera efectiva cualquier retroalimentación, es decir, lograran analizar y aprender de los errores.
“Aprender a gestionar el fracaso no solo fortalece la resiliencia de una empresa, sino que la hace más competitiva. En lugar de temerle, abracémoslo como un compañero de viaje en el camino hacia el éxito. Sólo a través de la aceptación y la adaptación constante podemos construir empresas transformadoras”, concluye Eric Jiménez. 
Acerca de Fuckup Nights
Fuckup Nights tiene como objetivo transformar las culturas corporativas promoviendo la seguridad psicológica, impulsando el rendimiento y la innovación. Durante la última década, la organización ha ayudado a asistentes en 300 ciudades y cientos de organizaciones de diversas industrias a superar el miedo al fracaso y fomentar un crecimiento saludable. Fuckup Nights ofrece una gama de servicios, que incluyen una herramienta de diagnóstico organizacional, talleres, cursos en línea y eventos corporativos que fomentan conversaciones y ayudan a individuos y organizaciones a aceptar el fracaso como un paso vital hacia la innovación y la productividad. Si quieres saber más visita: https://www.fuckupnights.com/

En un entorno  empresarial donde el éxito es ampliamente reconocido y celebrado como la meta de toda organización, la percepción del fracaso frecuentemente se ve ensombrecida por un estigma de vergüenza y rechazo. Esta visión, predominante en muchas culturas corporativas, plantea una pregunta fundamental: ¿Quién aspira conscientemente al fracaso? Aparentemente nadie; sin embargo, el fracaso ofrece oportunidades valiosas para el aprendizaje, el crecimiento y la innovación.

“Cometer errores es algo inevitable, el verdadero problema es que se atribuye a rasgos negativos de las empresas y colaboradores, cuando en realidad es un elemento clave del proceso de aprendizaje, que si se esconde abajo de la alfombra por miedo o pena, se están perdiendo importantes oportunidades para alcanzar metas ambiciosas”, explica  Eric Jiménez, Gerente General Global de Fuckup Nights, movimiento global enfocado en crear experiencias que deconstruyan la percepción de fracaso.

Añade que aunque el fracaso forma parte de la naturaleza del ser humano y del día a día de las empresas, rara vez se estudian sus impactos o se indaga para aprender de esos errores, esto ha llevado a que el miedo al fracaso se generalice y como consecuencia, el 24% de los proyectos impulsados por los colaboradores de una organización se detienen por miedo a fracasar.

En el Reporte Failure At Work 2023: Tendencias, Datos e Insights sobre el Fracaso en el Lugar de Trabajo (2022-2023), Fuckup Nights hace un diagnóstico para evaluar la relación e impacto del fracaso en las empresas con el objetivo de identificar áreas de mejora y oportunidades de crecimiento en su cultura de trabajo.

El estudio revela que aunque en 2023, el porcentaje de proyectos parados por miedo al fracaso disminuyó (en 2022, fue de 32%), se trata de un tema recurrente en las organizaciones, lo que demuestra que aún hay mucho trabajo por hacer hacia la transformación en la narrativa del fracaso. 

“Sí, el miedo al fracaso está disminuyendo. No obstante, persisten el estigma que lo rodea y la falta de estrategias para gestionarlo. Las empresas no enfrentan el fracaso, lo postergan, lo aplazan, independientemente del alivio a corto plazo que esto les provoca, la razón sigue”, afirma Jiménez. 

La confianza es otro tema pendiente. Datos de Fuckup Nights arrojan que el 36.3% de las personas prefiere postergar los resultados de su proyecto por miedo a que necesiten mejoras, se trata de un indicador que en 2023 creció en comparación con 2022 cuando se registró un 33.5%. 

El mismo estudio señala que el 11.7% de los colaboradores normalmente implican a alguien en los proyectos porque si algo sale mal, no son los únicos responsables. Además, el 21.3% prefieren  dejar de proponer ideas por miedo a que sean rechazadas.

¿Qué deben hacer las empresas ante el fracaso? 

De acuerdo con Fuckup Nights, las organizaciones pueden transformar su forma de afrontar el fracaso si llevan a cabo los siguientes acciones:

1. Fomentar una cultura laboral abierta al fracaso

“Se necesitan empresas que acepten y aprendan del fracaso en lugar de castigarlo. La innovación y el progreso están vinculados con la audacia, la valentía y el valor de intentarlo”, comenta Jiménez. 

2. Entender el fracaso como una experiencia humana

Todas las personas se equivocan, las empresas que logren entender el fracaso como parte de la experiencia humana y no como un rasgo negativo de sus equipo, están un paso adelante.

3. Compartir historias de fracaso 

Si las empresas crean espacios seguros para hablar del fracaso, el equipo se sentirá menos vulnerable y tomará de manera efectiva cualquier retroalimentación, es decir, lograran analizar y aprender de los errores.

“Aprender a gestionar el fracaso no solo fortalece la resiliencia de una empresa, sino que la hace más competitiva. En lugar de temerle, abracémoslo como un compañero de viaje en el camino hacia el éxito. Sólo a través de la aceptación y la adaptación constante podemos construir empresas transformadoras”, concluye Eric Jiménez. 

Acerca de Fuckup Nights

Fuckup Nights tiene como objetivo transformar las culturas corporativas promoviendo la seguridad psicológica, impulsando el rendimiento y la innovación. Durante la última década, la organización ha ayudado a asistentes en 300 ciudades y cientos de organizaciones de diversas industrias a superar el miedo al fracaso y fomentar un crecimiento saludable. Fuckup Nights ofrece una gama de servicios, que incluyen una herramienta de diagnóstico organizacional, talleres, cursos en línea y eventos corporativos que fomentan conversaciones y ayudan a individuos y organizaciones a aceptar el fracaso como un paso vital hacia la innovación y la productividad. Si quieres saber más visita: https://www.fuckupnights.com/

 

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