Confianza y seguridad, los principales retos de pagos digitales
La pandemia aceleró los procesos de transformación digital de las empresas. Durante este periodo, los servicios financieros digitales y el comercio electrónico tuvieron un gran crecimiento; sin embargo, amenazas como el fraude digital también crecieron. En el marco del Shopify México Insignia, evento en línea enfocado a emprendedores, diversos especialistas reflexionaron sobre el estado del ecosistema de pagos digitales y los retos de cara a la ‘nueva normalidad’.
En la charla participaron José Andrés Chávez, CEO y cofundador de Bayonet; Eduardo Castañeda, director de Shopify México; Adalberto Flores, CEO de Kueski; Luigi Forestieri, gerente de marketing de PayPal México y Rossana Escalante, mánager de pagos online de Mercado Pago México.
“Al mercado online de México se le está restando muchísima liquidez. Se pierden millones de dólares al año en el país por fraude como por costo de oportunidad, es decir, por no vender, por no dar créditos, por no abrir otra línea de negocios ¿Quién está resolviendo todo eso? ¿Quién está haciendo que las transacciones digitales sean más confiables? Si se atiende esto, habrá mucho mayor liquidez”, señala José Andrés Chávez, CEO y cofundador de Bayonet, plataforma de prevención de fraudes y optimización de pagos electrónicos.
De acuerdo con cifras de la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO), 80% de los usuarios que aún no compran en canales digitales se resisten a hacerlo porque no quieren arriesgarse a ser víctimas de fraude electrónico. En el mismo sentido, 74% de estos usuarios no confían en dar sus datos bancarios al momento de comprar en un comercio electrónico. Esta desconfianza puede impactar directamente en el crecimiento de los negocios.
Contracargos, una de las amenazas
El fraude electrónico tiene más de un rostro. Ya sea la filtración de información de tarjetas de crédito o débito, a causa de malas prácticas de bancos y empresas u otras prácticas como el phishing o ransomware. Los contracargos representan un riesgo importante para los e-commerce.
Esta práctica consiste en que el tarjetahabiente se comunica con la institución financiera para reportar una transacción no reconocida o autorizada. El fraude se da cuando los usuarios sí solicitaron y recibieron el producto o servicio y aun así solicitan la devolución de su dinero o cuando alguien usó sus datos bancarios para hacer una compra. Sea cual sea el caso, es la empresa la que termina asumiendo el costo de esta acción. Éste es un problema que afecta tanto a los negocios como a los bancos.
De acuerdo con las Estadísticas de Comercio Electrónico 2020 de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), durante 2020 se registraron 3 millones 451 mil 219 contracargos en compras autorizadas, lo que representó un monto de 3 mil 348 millones de pesos. El porcentaje de contracargos respecto a compras autorizadas en este periodo fue de 0.59%.
Ante esta amenaza, los representantes de plataformas financieras y pasarelas de pago indicaron que sus empresas asumen los contracargos y enfocan sus esfuerzos para tratar de detectarlos a tiempo y evitar fraude.
Los desafíos del ecosistema de cara al futuro
Rossana Escalante, manager de pagos de Mercado Pago México, hizo énfasis en que tanto las pasarelas como las plataformas de e-commerce deben de trabajar en la digitalización de los medios de pago y hábitos, simplificar la experiencia para los compradores y vendedores, además de innovar e incorporar tecnologías que permitan el desarrollo. Para la especialista es importante que el ecosistema se consolide y para esto es necesario que cada vez haya mayor inversión.
Para José Andrés Chávez, los jugadores del ecosistema digital deben de hacer un análisis colectivo para darle vuelta al problema de fraude que afecta a todos los involucrados. El especialista aseguró que es necesario que este análisis se haga de manera conjunta, en lugar de manera aislada, para que el esfuerzo contra defraudadores tenga un impacto mayor.
“Esa es nuestra meta: lograr que el ecosistema financiero tenga las herramientas para confiar en la persona que está llegando a hacer negocios. Más que competir con otras empresas de detección de fraude o los mismos procesadores de pagos, lo que hacemos es una especie de buró de reputación digital en donde, con base en los registros de la red colectiva, se sepa si un usuario es un buen comprador o fraudulento. La meta es volver al fraude rentable”, agregó el CEO de Bayonet.
En su intervención Adalberto Flores, CEO de Kueski afirmó que lo más importante es ver qué hacen las fintech, pues están utilizando tecnología de punta como Inteligencia Artificial, para cerrar la brecha de la inclusión financiera. “El 57% de las personas que viven en México no están en la economía formal. Mientras más acceso podamos dar, más serán las soluciones que como fintech podamos ofrecer”.